El análisis evidencia la falta de datos para el monitoreo del ODS 4 en relación a las personas con discapacidad, situación que se replica a nivel nacional, regional e internacional. El objetivo de “no dejar a nadie atrás” solamente puede alcanzarse si se produce información estadística suficiente, pertinente y debidamente desagregada, pues -de lo contrario- se invisibiliza a uno de los grupos históricamente más excluidos del sistema educativo y se construyen diagnósticos parciales, imprecisos y poco confiables para el diseño de políticas públicas con vocación de universalidad.