18/08/2017
Por Pilar Samaniego
“Enseñar es un ejercicio de inmortalidad. De alguna forma seguimos viviendo en aquellos cuyos ojos aprendieron a ver el mundo a través de la magia de nuestra palabra. Así, el profesor no muere nunca…”
Rubem Alves (1996), La alegría de enseñar
Para quienes somos docentes por vocación y formación, la palabra educación tiene un cariz que va de la mano con vida y cuya constante reside en la confianza y la ética. No se trata de un eufemismo y menos aún de una trivialidad, baste pensar en los padres y madres que dejan en nuestras manos a sus hijas e hijos, como en su momento muchos de nosotros lo hicimos también; así como en esos niños, niñas y adolescentes que año tras año asisten para enfrentar retos académicos, técnicos, científicos o sociales que son tan variopintos como multidimensionales, con una necesidad de escucha atenta que subyace a la interacción y que se torna presente con una fuerza cada vez mayor.
Las acciones emprendidas desde diversos ángulos –multilateral, gubernamental e institucional- en pro de garantizar el ejercicio del derecho a la educación y de posicionar los derechos de la niñez, sumadas al mundo de la comunicación en-línea y la virtualidad, han puesto en vitrina la información de episodios de conflicto y violencia con nuevos componentes que obligan a prestar mayor atención así como a generar estrategias de prevención, atención, remediación y restitución.
La obscena pervivencia del maltrato y la violencia nos descoloca, más aún al enfrentar patologías extremas de pederastas y violadores como, por ejemplo, la espeluznante historia de terror que vivieron 41 niños y niñas de Sexto Grado en un aula ecuatoriana durante el año lectivo 2010-2011 (Serrano, 2017), con sentencia dictada el 21 de marzo de 2016 por el Tribunal de Garantías Penales con sede en la ciudad de Quito y ratificada por la Corte Constitucional del Ecuador el 31 de mayo de 2017 (Sentencia N° 167-17-SEP-CC, 2017). La sentencia impuso la pena máxima de siete años de privación de libertad para el culpable de tan execrables hechos de violencia sexual; por concepto de reparación integral dispuso que el sentenciado pague la suma de diez mil dólares a cada estudiante afectado; como medida de protección el tratamiento respectivo que requieran la persona procesada o víctima y sus hijos menores de 18 años; y, como reparación inmaterial y el reconocimiento al derecho a la verdad: notificar al Ministerio de Educación para que el Estado establezca políticas públicas para exigir a las instituciones educativas privadas requisitos para la selección y contratación del personal docente y administrativo (Ministerio de Educación, 2017), oficiar a la institución educativa que el aula donde estudiaron las menores se utilice de manera exclusiva como salón de audio y video donde se impartan charlas de prevención contra la violencia infantil, se coloque en ese lugar una placa con la leyenda: En memoria de las víctimas de abuso infantil en el sistema educativo, y se expresen disculpas públicas (Jiménez, 2017).
La violencia sexual infantil en el aula, perpetrada por quien funge como docente, contraviene todo principio, toda lógica, toda ley. Obliga a mirar cifras escalofriantes (González & otros, 2017) que aguardan urgentes respuestas individuales así como de carácter familiar, social y estructural, para lo cual hemos de cuestionarnos a fondo sobre las múltiples aristas de la violencia, la agresividad y el riesgo. A continuación, algunas de ellas.
– ¿Qué identidades humanas se edifican a través de aprendizajes sociales y construcciones culturales?
– ¿Cuáles son los contextos subjetivos de difícil acceso por haberse naturalizado?
¿Cuál es imaginario social de éxito? ¿En qué se afincan el afán de ascenso social y mejora económica?
– ¿Qué se entiende por dignidad, confianza y ética? ¿Qué ejemplos damos y recibimos?
– El ejercicio de fuerza y poder, ¿se ostenta desde una óptica unidimensional del ser?
– La feminidad y la masculinidad, ¿tienen una génesis unívoca con tinte de eternidad o un enfoque dinámico?
– La dominación y el menosprecio, a través de actitudes e intercambios verbales, ¿se detectan tempranamente y se actúa en consecuencia?
– La libertad y la alegría, ¿se entienden como valores?
– Cuáles son los roles de la familia y del centro educativo?
– El centro de la educación, ¿es el ser o la ‘imagen’ de una institución?
– Las emociones y sentimientos, ¿se expresan o se silencian con ostentaciones y obsesiones lapidarias?
– Los sistemas de educación y de justicia, ¿cómo interactúan?
Para concluir, cabe subrayar que cada vez son más las vivencias de escuelas que se plantean un compromiso tendente a mantener al estudiante como el centro de su razón de ser; que cuidan del profesorado porque más allá de enseñar a leer, a escribir, a pensar… gestiona la convivencia, las relaciones y el acercamiento de la familia a la institución así como la vinculación entre sus miembros; escuelas que se de-construyen para re-construirse en una incesante dinámica a la luz de una educación inclusiva que cobra significado en la cotidianidad del aula, al mirarse en el ‘otro’, al conjugar respeto y valoración como conceptos interdependientes y abarcadores que descubren singularidades y complementariedades para no solamente estar-en-el-mundo sino ser-en-el-mundo.
*Pilar Samaniego, educadora e investigadora. Autora de estudios y publicaciones sobre: derechos humanos, educación, discapacidad y políticas públicas.
Bibliografía
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Jiménez, M. (20 de junio de 2017). Padres de víctimas de atentado al pudor no están satisfechos con disculpas de Academia Traversari. El Telégrafo. Recuperado el 16 de agosto de 2017, de http://www.eltelegrafo.com.ec/noticias/judicial/13/academia-traversari-coloca-una-placa-tras-sentencia-de-la-corte-constitucional
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Santos, M. A. (2010). Arqueología de los sentimientos en la escuela (Quinta ed.). Madrid: Bonum.
Sentencia N° 167-17-SEP-CC, Caso N° 1527-16-EP (Corte Constitucional del Ecuador 31 de mayo de 2017). Obtenido de https://www.corteconstitucional.gob.ec/sentencias/relatoria/relatoria/fichas/167-17-SEP-CC.pdf
Serrano, A. (26 de julio de 2017). Horror en el Sexto C. La Hora. Obtenido de https://www.lahora.com.ec/noticia/1102087359/horror-en-el-sexto-c