Cerca de casa o del trabajo, bilingüe o con enseñanza de inglés, jornada simple o completa. Esas son algunas de las tantas dudas que los padres se plantean a la hora de elegir la escuela para sus hijos. Pero hay casos en los que una única pregunta define la elección: “¿Aceptan a mi hijo?”. Si bien la Ley Nacional 26.206 establece desde 2006 que la educación en el país es inclusiva, muchas escuelas privadas se niegan a aceptar alumnos que por sus necesidades especiales deben asistir acompañados de una maestra integradora.
“Recibimos infinidad de correos electrónicos de padres que no encuentran un colegio que acepte a sus hijos y otros que cuentan que reciben muchísimas condiciones una vez que lo encuentran. Les dicen que si la maestra integradora falta, el chico no puede ingresar al establecimiento o que no va a tener actividades fuera de hora, como inglés”, denuncia Gabriela Santuccione, miembro de Amparar, una ONG que asesora a personas que sufren algún tipo de discapacidad.
Clarín – 23/05/2016