El proceso de integración de jóvenes discapacitados en escuelas secundarias comunes está lejos de graduarse. Y no porque no haya completado sus estudios, sino porque no tiene título habilitante.
La Clínica Jurídica en Derechos Humanos y Discapacidad de la facultad de Derecho de la UNLP “hace un tiempo que está recibiendo cada vez más casos vinculados a educación inclusiva”, afirma su director, José Martocci. Es que los colegios secundarios entregan “títulos no homologables (equiparables a los del resto)” a los egresados integrados, lo que cercena su posibilidad de seguir estudiando. O su derecho a tener un diploma “como el de sus compañeros” colgado en la pared.
El proceso de integración de jóvenes discapacitados en escuelas secundarias comunes está lejos de graduarse. Y no porque no haya completado sus estudios, sino porque no tiene título habilitante.
La Clínica Jurídica en Derechos Humanos y Discapacidad de la facultad de Derecho de la UNLP “hace un tiempo que está recibiendo cada vez más casos vinculados a educación inclusiva”, afirma su director, José Martocci. Es que los colegios secundarios entregan “títulos no homologables (equiparables a los del resto)” a los egresados integrados, lo que cercena su posibilidad de seguir estudiando. O su derecho a tener un diploma “como el de sus compañeros” colgado en la pared.
El Día – 22/05/2017